Para crear un desarrollo a medida nos basamos en las necesidades y requerimientos del cliente. En este sentido, analizamos en profundidad el Briefing y nos empapamos de la filosofía de la marca. Así, podemos ofrecer un producto acorde a la línea y la estética buscadas.
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Lectura del Briefing
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Investigación
Una vez tenemos claras las directrices del cliente, pasamos a la acción. Empezamos haciendo un estudio de mercado que nos ayude a detectar los puntos débiles de la competencia y los aspectos de mejora que podemos aplicar en el proyecto.
Seguidamente, ahondamos en las últimas tendencias de diseño para ver cuáles son las que más encajan con el producto deseado por el cliente y adaptar sus necesidades a las últimas innovaciones. En esta fase también definimos las tipografías que se utilizarán, que deben encajar con la línea definida para todo el proyecto. -
Creación de mockups
Llegados a este punto, creamos mockups, o páginas de demo, que nos ayudarán a tener una primera visión del proyecto final. Los mockups nos permiten hacernos una idea de la experiencia de los usuarios y, si es necesario, realizar los cambios oportunos para que el resultado final sea un entorno agradable y focalizado en los objetivos del cliente.
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Aplicación de diseño y estilos de mockups
Tras presentar los mockups y realizar los últimos retoques, aplicamos el estilo y diseño que ya hemos definido para conseguir un proyecto final acorde a la línea gráfica de la marca y que refuerce la identidad corporativa del proyecto.
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Propuesta final
Una vez el cliente ha aceptado el diseño y el estilo que hemos preparado, llega el turno de la propuesta final. Para llevarla a cabo y que en todo momento el cliente pueda ver en qué punto se encuentra, utilizamos herramientas interactivas, como por ejemplo Figma o Adobe XD, que permiten realizar una navegación equiparable a la que será el entorno final.
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Manos a la obra